Dos conjuntos vinculados al rico patrimonio hidráulico que atesora Fuente Álamo han conseguido la protección cautelar de la Consejería de Cultura. Se trata de unas galerías con lumbreras (siglos XVIII y XIX) y del lavadero-abrevadero de la rambla de Fuente Álamo. La medida de salvaguarda tiene carácter provisional a la espera de que se resuelvan de forma definitiva los expedientes.
En 2017, el Ayuntamiento solicitó para esos elementos su catalogación como Bien de Interés Cultural (BIC), aunque sin recibir respuesta alguna en todo este tiempo. Ante ese silencio por parte de la Administración regional, la asociación Huermur ha hecho valer la ley, que establece que debe iniciarse el procedimiento transcurridos seis meses de la solicitud. Así que ahora la Consejería ha comunicado formalmente que ambos conjuntos ya gozan de dicha protección por ‘acto presunto’ a la espera de que los técnicos de Patrimonio Histórico tomen una decisión al respecto.
Las galerías con lumbreras se levantaron como sistema drenante de zonas encharcadas con alto riesgo palúdico, unas infraestructuras de las que apenas quedan restos en España. En cuanto al lavadero, formó parte de una red encaminada a atender «un servicio básico de higiene».